lunes, 14 de noviembre de 2011

"Justo cuando acababa de resolver su tercer problema de trigonometría, noté su mano deslizándose sobre mi resago. Le dí un ligero cachete.

- Continua estudiando - le dije cuando levantó la vista - Nadie te ha dado permiso para parar.
Sonrío y escribió algo al pié de la hoja. Ahora la solución decía: 

«Halla x si (x)=2sen3x, sobre el dominio -2n<2n» 
X= BETH. 

- ¡Para de hacer el tonto!
- ¡De eso nada! ¡Es la verdad! Tú eres mi solución para todo - replicó. - El resultado final siempre eres tú. X siempre es igual a Beth."


(Cita: Halo - Alexandra Adornetto.)

No hay comentarios:

Publicar un comentario